• Las falanges y los metacarpianos forman la estructura ósea de la mano. Tienen gran importancia en la biomecánica de los dedos dado que la rotación, angulación o el acortamiento de los mismos puede alterar la movilidad de los dedos. Son frecuentes y generalmente producidas por golpes de puño, traumatismo directos o accidentes deportivos. Están acompañadas de dolor intenso, edema y dificultad para mover la mano afectada.

Para esta patología, ofrecemos enfoques personalizados según las características de la fractura. En casos de fracturas no desplazadas, podemos aplicar técnicas de inmovilización con férulas o yesos, hasta lograr la consolidación ósea. Sin embargo, si la fractura presenta un desplazamiento significativo, optamos por intervenciones quirúrgicas que se adaptan a cada situación, según las necesidades del paciente y la naturaleza de la fractura. 

Realizamos estos procedimientos de forma ambulatoria bajo anestesia local, lo que permite que el paciente regrese a casa el mismo día. Además, gracias a nuestra experiencia y uso de imágenes guiadas por fluoroscopia, muchas veces podemos realizar cirugías minimamente invasivas, con incisiones mínimas de 3 a 5 mm, lo que brinda una recuperación más rápida y menos molestias durante la recuperación postoperatoria.

• Se caracteriza por la presencia de nódulos o cuerdas fibrosas que a veces puede generar la retracción o la impotencia para estirar el dedo afectado. Los nódulos inicialmente se pueden confundir con callosidades. 

Cuando la enfermedad de Dupuytren causa una reducción significativa de la funcionalidad de los dedos, optamos por opciones de tratamiento quirúrgico especializadas. El Dr. Sarmiento utiliza técnicas avanzadas para eliminar las bandas retráctiles responsables de la contracción de los dedos, mejorando así la amplitud de movimiento y restaurando la funcionalidad.

Además de la cirugía, el doctor ofrece enfoques terapéuticos complementarios para ayudar a cada paciente en su proceso de recuperación y rehabilitación. Su objetivo es trabajar de cerca cada caso para desarrollar planes de atención individualizados, que pueden incluir terapias de movilidad, fortalecimiento y estiramiento, buscando lograr una recuperación exitosa.

• También conocido como dedo en gatillo, es una patología que provoca el resalto o traba del dedo y está producido por una inflamación en el tendón flexor que se bloquea en las poleas de la mano. Generalmente el grado de bloqueo es mayor a la mañana.

El tratamiento comienza con un análisis detallado del caso para determinar el enfoque más adecuado. El Dr. Sarmiento desarrolla un plan de rehabilitación integral que combina terapias de movilidad y ejercicios específicos, antiinflamatorios y eventuales ferulajes.

Si estos métodos no brindan alivio suficiente, existen opciones adicionales que ofrecen la posibilidad de infiltraciones especializadas destinadas a reducir la inflamación y aliviar los síntomas.

En casos más avanzados, cuando otros tratamientos no han logrado los resultados deseados, la cirugía puede ser una opción a considerar. Llegado al caso, el Dr. Sarmiento emplea técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas para liberar el tendón flexor y restaurar el movimiento normal del dedo.

• Es una condición común que puede afectar en gran medida tu calidad de vida debido a que provoca rigidez y dolor en la base del pulgar, dificultando actividades de la vida diaria como abrir frascos, girar llaves, agarrar objetos o realizar movimientos precisos. 

El Dr. Sarmiento proporciona tratamientos personalizados dedicados a recuperar la funcionalidad perdida y reducir el dolor.

Inicia con sesiones de kinesiología adaptadas a las necesidades individuales. Estas terapias se enfocan en fortalecer los músculos responsables del movimiento del pulgar, aliviar la tensión y mejorar la movilidad articular. Implementamos técnicas innovadoras, como la terapia con ejercicios específicos y férulas diseñadas para cada paciente y así potenciar su proceso de recuperación.

Si estos tratamientos no brindan los resultados deseados o si la rizartrosis se ubica en una etapa más avanzada, es necesario recurrir a opciones quirúrgicas de vanguardia. El doctor según el estadío de la enfermedad considera la aplicación de técnicas de artroscopia mínimamente invasivas. Mediante pequeñas incisiones y con la utilización de instrumentos precisos y una cámara de alta definición, se tratan las lesiones del cartílago y se optimiza la función articular. Este enfoque permite una recuperación más rápida y menos molestias postoperatorias.

En situaciones en las que la rizartrosis ha progresado significativamente, la opción de una artroplastia o reemplazo articular puede ser recomendada. El empleo de prótesis de última generación diseñadas específicamente para el pulgar, tienen el objetivo de restaurar la función y mejorar la calidad de vida. Estas intervenciones se realizan con técnicas avanzadas y anestesia regional, lo que permite una recuperación más rápida y un retorno temprano a las actividades diarias.

• Pueden provocarse en deportes de agarre (artes marciales o rugby) o por heridas cortantes. El paciente no puede doblar en forma completa el o los dedos lesionados. Muchas veces las heridas cortantes se asocian a lesiones de los nervios de los dedos, en estos casos se siente diferente el dedo, como si tocara cartón o con la sensación del dedo dormido.

En la mayoría de los casos puede ser necesario realizar una cirugía reparadora. Buscando unir los extremos del tendón lesionado para permitir una correcta cicatrización y restaurar la función de la mano. En caso de lesiones nerviosas asociadas, es necesario mediante técnicas de microcirugía realizar la reparación del nervio, para de esta manera poder recuperar sensibilidad en el dedo lesionado

Es importante tener en cuenta que el proceso de recuperación de una lesión del tendón flexor puede llevar tiempo y requerir un seguimiento cuidadoso. La rehabilitación postoperatoria, que incluye ejercicios de fortalecimiento y movilidad, es crucial para restaurar la función de la mano y evitar complicaciones a largo plazo.